Un avión de combate sigiloso F-35B británico, valorado en más de $100 millones, quedó varado en el Aeropuerto Internacional de Thiruvananthapuram en Kerala, India, por más de cinco semanas debido a una falla hidráulica tras un aterrizaje de emergencia. La larga estadía del avión generó una ola de memes e interés público tanto en India como en el Reino Unido. Después de ser reparado por un equipo de ingenieros del Reino Unido y con el apoyo de las autoridades indias, el avión fue declarado apto para volar y ahora ha partido hacia Australia para reunirse con su grupo de portaaviones. El incidente resaltó los desafíos logísticos y costos asociados con desplegar tecnología militar avanzada en el extranjero, incluidas las significativas tarifas de estacionamiento en aeropuertos. Tanto funcionarios británicos como indios expresaron gratitud por la cooperación durante el proceso de reparación y recuperación.
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